Melilla está muy cerca de, por primera vez, conseguir cerrar el año con un millón de pasajeros. El viceonsejero de Turismo reconoce que, aunque hace no demasiado tiempo era impensable soñar con esa cifra, ahora todos los indicadores apuntan en esa dirección. A pesar de que el número de turistas alojados ha bajado en torno al uno por ciento respecto a 2011, compensa esta pérdida el hecho de que aumenten bastante las pernoctaciones. Javier Mateo asegura que viene menos gente, pero se queda más tiempo.
Esta tendencia ha contribuido a que el transporte aéreo acumule un crecimiento del diez por ciento que, en algunos meses, asciende a casi el doce. El viceconsejero está convencido de que el hecho de que el aeropuerto de Melilla sea prácticamente el único de toda España que ha visto mejorar sus indicadores es un buen argumento para reclamar una mayor cuota de servicio. Mateo apuesta, en este sentido, por ampliar el horario y mantener tanto al personal como su equipamiento.
Con el fin de alcanzar ese millón de pasajeros, Turismo puso en marcha la semana pasada una campaña promocional en las tres ciudades con las que Melilla está comunicada vía marítima. Un autobús de grandes dimensiones ha hecho paradas de dos días en Almería, Motril y Málaga, donde personal de la Viceconsejería y operadores tanto locales como nacionales han vendido su producto de cara al puente de diciembre. El objetivo es que los visitantes pasen unos días en Melilla atraídos, además de por su oferta general, por el precio de artículos que no están cargados con el IVA.